la opinión musical de Litoscar

Sunday, October 14, 2007

Esta madre (que es my mother) es una freidora cargada de pollo empanizado




Desde una infanta necia, pasando por una doncella que se dilata, hasta una chichi con moretones, la poesía de Minerva Reynosa siempre ha sido (y será) un fríjol saltarín en un plato de machaca. Y el que tenga un amor que lo cuide. Y el que tenga una pistola jale el gatillo. Porque a cada pan panadero le ha llegado su hora.
En Emotoma, a los taqueros de oriente y occidente se les adivinan los caprichos. A los de Madero y Colón, que piden queso, no les dan. Es que tanto ludismo, tanto argüende, tanto tirol, tanto viboreo no cabe en la página. Hace falta un video, una contestadota, una sanduichera para que no se azote la puerta, para que no se despierte el niño. Pero no hay de otra, grita la cumbia: el funk será convulsivo o no será. Será triunfo, será cerveza. Los personajes que se pasean por los poemas de Minessota Reynosa han dejado el libro todo añorado, todo altruista, todo para el dj, para el programa de Telesecundaria.
Y si no se soporta el rap, no se soporte la urbe. Esto no es un partido del América. Aquí sí se dan los goles. Minerva, oh, ah cómo le sale la gambeta, cómo se le descompone la secadora. Cada tanto parece una cicatriz, la herida no-sur que deja la carcajada del poema. La famosa cita en la bajada de cada estación del metro: aivalagua.
En su defecto, pues no ganó una grabadora con compac disc, papá, Emotoma se baila una pieza pegadita con Carmen Alardín para terminar las dos comiendo garnachas y chupándose los dedos. Pero qué monchis, la de estas dos compadritas, desparramadas como un blues, como una guitarra que recién acabara de tocar Johnny be good.
Minerva be bad. Be movie. Be city. Pero ai qué rechulo es Nuevo León. Por eso de aquí corrimos al mundo, pa que no haga finta. Para que este tránsito no sea otra peregrinación sin virgen, sin limosnita, sin niño dios. Estos poemas (ya todos lo saben, la Santanera, los Libres y locos y los locutores lo saben, lo saben) tienen un gusto a colación, a “bolo padrino”, a “con queso por favor”. Que bien pueden llamarse de otra forma, como Confesiones de una comedora de pizza, o agasajarse a un morro en medio de la plaza, o sorberse los mocos afuera de la primaria. Pero nunca nos defrauda, siempre existe esa vocación hyper porque el poema sea un salto al vacío, una serie de televisión, un carro alterado, nunca una moda otoño-invierno.
Hay que distraer al vecino, dorar los taquitos en manteca, y qué mejor desayuno escolar que ‘Mother Shapiro’. Qué mejor que qué mejor. Y vivan los vicios caros, los ajustes de cuentas, los chocolates con almendras. Que las golondrinas ya no se cantan con mariachi, ahora uno se despide en el Arco-iris, en el Jardín, en Guadalupop. Contra cualquier programa de gobierno un poema. Contra cualquier encerrón una madre, una pistola, una receta médica. Una arpilla de gaviotas para el mal del corazón. Un segundo de la tarde para el relingo.
Y qué decir de la cita puntual, del after y el before. Cumplida a punzadas con los Sex pistols. Para así no ser nada. Ni cita. Sólo síntomas. Síntomas en la cabeza dura del hoy es hoy. De los amantes que para la rotura utilizan ropa térmica. Ropa que va desde los comprimidos a los analgésicos. A la demostración fabulable, falibre, indeleble. Que en cada poema dice, grita: Si quieres bailar la cumbia, tienes que hacerlo muy bien. Se sacude, baila en la Fe Music Hall, la marca desde todos los estados de la mona. Que para muñecas la de estos labios pintados de marcha fúnebre, de utilería en la guadaña del televisor.
No me queda más, amenaza Alicia Villarreal. Minerva contesta No me duele nada, ni la doncella altiva y terrible que soy los días antes a mi periodo. Y si he perdido algo es por la maldita costumbre de reglar. Aquí se deja todo como la sangre que brota de en medio de sus piernas. Así avienta los poemas en la página, con el dolor, el gusto, el alivio de que tendrán que venir 28 días para que el suplico vuelva como una canción que uno odia, pero que sin embargo te la sabes de tanto escucharla en la radio. 28 días para poner el temple a remojar.
Y entre todo: la banda. William Carlos Williams baila “1979” mientras Billy Corgan se unta mil tratamientos contra la caída del cabello. El viejo Dimoxinil que tanto le sirvió a Homero lo único que sostiene son estos poemas, estos poemas que son los peluquines del instante. Nunca más veraz el instante como en esta cita extraída de las telenovelas: Mi nombre es Minerva Reynosa y soy Alcohólica. Eh aquí el drama del horario estelar. El canal de moretón.
Esto no es un asunto de tribulaciones paquidérmicas, al flan flan, y al pisto pisto. Sirva cada poema para un adiós a Atahualpa. Sirva cada charola de charales con piquín para un remolino en el centro del poemario. La calle sisters recién empedrada de levítico. Exprimidorcita Mulinex ruega por nosotros, Resumiderito Mulinex ruega por nosotros, Berrinchitos 2000 ruega por nosotros. Madre, pare de sufrir, jale la pistola, péguese un tiro o váyase al baile de Pesado.
Y así se sigue, como un corrido de la insoportable levedad del vallenato, por toda la pista de baile, para reafirmarnos su condición zen pop, de kamikaze del Microsoft, para decirnos más o menos así: échale más hermenéutica a tus tacos, más cilantro a tu metafísica, más posmodernismo al chicharrón. Y todo antes, mucho antes de que nos hagamos rucos, antes del besito de las buenas noches, antes de dejar este mundo para irnos de papirrol.
Emotoma
Minerva Reynosa
Conarte, 2007

2 Comments:

Anonymous Anonymous said...

You could easily be making money online in the undercover world of [URL=http://www.www.blackhatmoneymaker.com]blackhat seo world[/URL], You are far from alone if you have no clue about blackhat marketing. Blackhat marketing uses not-so-popular or misunderstood avenues to produce an income online.

1:27 AM

 
Anonymous Anonymous said...

[url=http://www.23planet.com]casino[/url], also known as settled casinos or Internet casinos, are online versions of well-known ("chunk and mortar") casinos. Online casinos help gamblers to disgrace a accommodate up and wager on casino games absolutely the Internet.
Online casinos customarily inadvertently b perhaps on the call odds and payback percentages that are comparable to land-based casinos. Some online casinos taking higher payback percentages in the overwhelm of mettle instrument games, and some drop upon known payout magnitude audits on their websites. Assuming that the online casino is using an politely programmed indefinitely carry generator, details games like blackjack take an established congress edge. The payout incise up after these games are established sooner than the rules of the game.
Uncountable online casinos sublease or beget their software from companies like Microgaming, Realtime Gaming, Playtech, Wide-ranging Devil-may-care Technology and CryptoLogic Inc.

11:31 AM

 

Post a Comment

<< Home